Una tarde, sentados en el jardín, a la hora del crepúsculo, me dijo que, si algún día se me ocurría escribir nuestra historia de amor, que no la hiciera quedar muy mal porque entonces, su fantasma vendría a jalarme los pies todas las noches.
-¿Y por qué se te ha ocurrido eso?
-Porque siempre has querido ser un escritor y no te atrevías. Ahora que te vas a quedar solito, puedes aprovechar, así no me extrañarás tanto. Por lo menos confiesa que te he dado para una novela, ¿no niño bueno?
Mario Vargas Llosa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario